martes, 26 de mayo de 2015

A veces hay que caer y estar en lo más profundo para ver que detrás de cada persona que llegó a tu vida para hacerte daño, hay otra que está ahí con la intención de regalarte su mejor sonrisa. E incluso es capaz de sentarse a tu lado, hasta que te veas con fuerzas suficientes para volver a levantarte y seguir tu camino.
Y permitidme que os diga, que ese es el mayor tesoro que os puede dar la vida.

jueves, 7 de mayo de 2015

¿Por qué a veces nos cuesta tanto darnos cuenta de las cosas? Ojalá pudiésemos ver la realidad antes de perder lo que tenemos. Ojalá nos bastase con una mirada, una sonrisa, o un 'quédate'.
Ojalá te hubieses dado cuenta de todo lo que te he esperado, de todo lo que te he deseado, de todo el tiempo que he estado aquí sin saber nada de ti, y aún así he tenido esperanza en que volverías. Y me ibas a querer.... Aunque fuese un poco...
No imaginas cuánto te he querido, joder. Y mira que decirlo es fácil, pero qué difícil es sentirlo y tener que afrontar la maldita realidad de mierda una vez más. Cuánto te he querido y cuánto me desilusionas, me rompes, me matas... Una y otra vez. Y me rehago para ti, junto cada uno de los pedazos, y sabes que están débiles pero te da igual.
Tú llegas y los fortaleces para más tarde volver a joderlo todo. Te juro que no sé qué me haces para olvidar que tengo que quererme a mí más que a ti... Vete, del todo. No es sano quererte, me agotas y ahora me tengo que querer, tengo que empezar a valorarme y está claro que no me mereces... Quizá en algún momento me has merecido, pero no ahora mismo...
Y mira que me duele esta realidad, pero si es lo que has elegido pues que te vaya bien, jamás voy a desearte nada malo... Te quiero, cada vez más lejos... Poco a poco.