Tú me has enseñado que también se puede llorar de alegría. Tú me has enseñado que no hay mejor lugar para descansar que apoyada en tu hombro. Tú me has enseñado que una persona se puede levantar todos los días con una sonrisa de oreja a oreja pensando en un Siempre. Tú me has enseñado que se puede querer a una persona hasta el punto en que te duela. Tú me has enseñado que un día sin salir de casa por estar castigada no tiene porque ser aburrido estando a tu lado.  Tú me has enseñado que con solo un te quiero me tienes en tus manos... Tú me has enseñado que en realidad, por mucho que no lo quiera ver, creo que estoy enamorada...