martes, 8 de noviembre de 2011

NO, me niego a que digas que lo nuestro es imposible, porque aquí lo único que seria imposible es estornudar sin cerrar los ojos... y aun así, podría ser posible si me fuerzo los ojos con los dedos. NO me jodas, y no me andes con tonterías, porque lo único que nos separa entre tu y yo, es la conjunción 'y'. NO TE ATREVAS  hacerte el valiente , y menos el experto en imposibles... porque aquí lo único imposible es no sonreír cuando estoy contigo, por mucho que me tapes la boca con ambas manos, te sonreiré con los ojos, y aunque no me mires de frente se que lo haces de reojo, y luego me plagias la sonrisa. Dime que sentido tiene llevar las cosas hasta unas alturas que no tienen final, si luego quieres tirarlo todo al vacío. Te advierto de una cosa, mi corazón no se puede comprimir más, o lo sueltas o te explota en la cara.
Te prohíbo terminantemente, que me hables de imágenes de seguridad, porque entonces haré ojos ciegos y oídos sordos a tus señales... y multame si quieres, poco me importa. Pero eso si, no te olvides de pasar por pasa a cobrarte la factura en besos... No digas que lo nuestro es imposible, me niego. Y tampoco me digas que somos una causa perdida, porque tu eres la única persona que aun dándola por perdida, la busco hasta decir basta. Y te aseguro que no estoy dispuesta a decir basta. Y si quieres hablar de imposibles, hablemos de imposibles... Y pidamos lo imposible. Hagamos lo imposible.

No hay comentarios:

Publicar un comentario